"Quiero sumarme al llamado a que las familias no compren, no usen fuegos artificiales, que están prohibidos, pero sobre todo pensando en la salud y en el cuidado de sus niños y niñas", afirmó la mandataria en una visita a la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem).
Bachelet enfatizó que este último grupo es el más expuesto a este tipo de accidentes, que involucran quemaduras u otras lesiones graves por la manipulación de fuegos de artificio.
"Estas fiestas de fin de año son un momento de encuentro, de unión, de alegría, y espero que podamos hacerlo de la mejor manera posible", expresó.
Durante la ceremonia, la máxima autoridad destacó el aporte de Coaniquem, fundación que brinda "tratamientos integrales que contemplan no sólo a las personas que han sufrido quemaduras, sino también a sus familiares con rehabilitación física, apoyo psicológico y familiar", indicó.
La campaña que busca prevenir los accidentes por causa de fuegos artificiales es impulsada por Carabineros de Chile, Coaniquem y por el Gobierno, a través del Ministerio de Salud.
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En Chile, la venta y compra de fuegos artificiales por parte de personas comunes está prohibida por ley, y este tipo de productos sólo pueden ser manipulados por personal autorizado para ello.