"Con esta decisión (de recusar la medida), Novartis busca generar el espacio para presentar ante las cortes colombianas las razones de su desacuerdo fundamental con la DIP (Declaración de Interés Público) y las pruebas que demuestran que no existen circunstancias excepcionales que ameriten tal medida", señaló la farmacéutica en un comunicado.
En su comunicado, Novartis refiere que no existe ningún monopolio porque sí hay competencia genérica para el Glivec.
"Hay al menos tres alternativas no infractoras de la patente de Glivec disponibles en el mercado. Dos tercios de los pacientes colombianos están bajo estos tratamientos alternativos", reseñó la multinacional.
De igual modo, señaló que la acción de nulidad que presentará no se relaciona con el impacto financiero que genera la medida, ya que la patente en el país vence en el 2018, y defiende que su recusación buscará defender el tema de propiedad intelectual.
"Más que este caso puntual, nos preocupan las repercusiones que esta declaratoria injustificada podría tener para todo el sistema de propiedad intelectual y para el futuro de los medicamentos innovadores", dijo al respecto.
Al inicio de las discusiones entre ambas partes el precio del medicamento era, en promedio, de 700 pesos colombianos (unos 25 centavos de dólar) por miligramo, por lo que el Gobierno buscó negociar directamente con Novartis y le planteó una reducción en el precio máximo de venta al público de 140 pesos (unos cinco centavos de dólar) por miligramo, lo cual fue rechazado por Novartis.
Tras la medida adoptada por el Gobierno, el precio del Imatinib en el país fue fijado a 206 pesos (unos seis centavos de dólar) por miligramo.