A los visitantes del Peter Lougheed Provincial Park —ubicado a 130 kilómetros al oeste de Calgary— se les recomienda tocar el claxon para ahuyentar a los animales. Por lo que respecta a los peatones, está estrictamente prohibido empujar a los alces.
Please be advised of a moose warning for the Chester Lake and Burstall Pass Parking Lots and Area. More info @ https://t.co/iQCKu39cMb pic.twitter.com/ew8qLWmE7N
— Alberta Parks (@Albertaparks) 13 de diciembre de 2016
Los responsables del parque también piden a los visitantes que informen a las autoridades si detectan alces que se comportan de forma agresiva. Un alce macho canadiense pesa unos 453 kilogramos de media, mientras que las hembras pueden llegar a hasta los 420 kilogramos.
La sal es una parte importante de la nutrición diaria de estos animales. Sin embargo, "si no hallan una fuente natural de sal, van a la búsqueda de una fuente alternativa, como la sal que se posa en los vehículos tras el proceso de limpieza de la nieve", según explicó Doug Whiteside, del Jardín Zoológico de Calgary (Canadá), en una entrevista con Global News.