Y es que la Alianza Atlántica espera que el país norteamericano mantenga su peso dentro de la organización, y al mismo tiempo hay algunos países dentro de Europa que quieren aumentar los gastos en defensa sabiendo que otras naciones van a utilizar el dinero para otras cuestiones sociales que les interesan más a sus poblaciones.
Así interpreta Luis Rivas, columnista de Sputnik y exdirector de la cadena EuroNews, las contradicciones en las que está inmersa la OTAN. Este martes se reunieron en Bruselas los ministros de Exteriores de los países que la integran, y donde previo a la cita, su secretario general, Jens Stoltenberg, hizo dos declaraciones que fueron entendidas como contradictorias: por un lado dijo que la conexión transatlántica de Europa y EEUU es la base de la seguridad, pero por otro lado afirmó que la organización quiere relaciones más constructivas con Rusia.
Al mismo tiempo, opina Rivas, la OTAN convive con la contradicción: "por un lado siguen aumentando la presión militar hacia Rusia, y por otro van diciendo que hay que cooperar con el país eslavo. Se están dando cuenta, no sólo en la OTAN, sino también en todas las capitales occidentales que las últimas elecciones y los últimos movimientos sociales que ha habido, son todos partidarios de un acercamiento a Moscú", concluye Luis Rivas.
La línea política del próximo presidente de EEUU, Donald Trump, sumado a las diferencias entre los miembros de la OTAN pueden abrir la puerta a una grave crisis en las relaciones entre EEUU y sus aliados militares.