El 24 de noviembre se celebraron dos conferencias del Consejo científico-técnico de la empresa rusa Rosoboronexport en las cuales los representantes de la compañía discutieron las perspectivas de las exportaciones de los más avanzados sistemas de combate automatizados rusos, según informó la empresa en un comunicado.
"Se discutieron las perspectivas en cuanto a las exportaciones de los sistemas de disparo automatizado, varios tipos de módulos de combate y sistemas robóticos militares de control remoto, así como las posibilidades de mantenerse al tanto de las tendencias mundiales a la hora de elaborar los mejores sistemas de armamento", explica el comunicado.
"Actualmente, Rosoboronexport tiene un amplio abanico de contratos de armas y material bélico destinado a unidades de los ejércitos (…) que superan los 7.000 millones de dólares", anunció Igor Sevastiánov, el vicedirector general de Rosoboronexport.
Según afirman en la empresa, los productores rusos son capaces de competir de una manera eficaz con las compañías extranjeras en el mercado de las aeronaves no tripuladas pequeñas y medianas, así como en el de los sitemas robóticos de protección con componentes de inteligencia artificial. Las empresas Kaláshnikov y OPK ya están realizados trabajos en esta dirección.