Poco después de las elecciones presidenciales en EEUU, el presidente electo Donald Trump expresó su disposición de mejorar las relaciones con el líder ruso, Vladímir Putin, mientras que el Kremlin sigue fortaleciendo sus contactos con China, escribe el medio.
Además, en la víspera de las elecciones estadounidenses, el primer ministro ruso, Dmitri Medvédev, se reunió con el premier del Consejo de Estado de China, Li Keqiang, con el objetivo de abordar la situación en el sector energético.
"El volumen del comercio exterior entre las dos superpotencias podría crecer hasta 400 mil millones de dólares por año", apunta el medio.
Según los analistas de uno de los mayores bancos alemanes, DekaBank, la deuda externa del sector privado de la economía de Rusia se reduce debido a la disminución de la fuga de capitales, lo que, por su parte, permite mantener las reservas de divisas en 400 mil millones de dólares.
Los expertos sostienen que es muy probable que para el año 2017 la economía rusa salga de la recesión y el PIB alcance el 1.1%. Asimismo, el director de la empresa de inversión East Capital, Olle Olsson, destaca la reducción de la independencia de la economía del país eslavo del sector energético.
