La investigación contó con la participación del Instituto de Geofísica de la Universidad Nacional Autónoma de México, y fue realizada mediante una tomografía eléctrica tridimensional, que permitió descubrir otra pirámide abajo de la primera subestructura descubierta en los años 1930, parte de la civilización maya que dominó el sur de México, Honduras, Guatemala y El Salvador, extinta antes de la llegada de los europeos en el siglo XVI.
A través de estudios de termoluminiscencia y de fechado absolutos recientes, se determinó que el periodo habitacional más importante de Chichén Itzá se divide en tres etapas: la primera es de los años 550 al 800 después de Cristo (d.C.), correspondiente a una etapa de los llamados "mayas puros", fundadores de la ciudad-Estado.
La segunda etapa, del año 800 al 1000, corresponde a un momento transicional, cuando llegan migrantes de la cultura tolteca del centro México, y comienza el llamado estilo maya-tolteca —conocido por sus pilares y adoración de la deidad Chac-Mol—; y por último, del 1000 al 1300, d.C., cuando ocurrió la misteriosa decadencia de esa civilización prehispánica.
Confirman hallazgo de pequeña pirámide en Chichén Itzá. Por @MonicaMateosV https://t.co/tSjorzgJYC pic.twitter.com/ffSFb749Vi
— El Lector (@LiteraturayMas_) 16 ноября 2016 г.
En una primera etapa, los arqueólogos descubrieron que la misma pirámide maya está construida sobre una oquedad: "Un cuerpo de agua o cenote", como se llaman los ríos subterráneos que corren por las formaciones rocosas calcáreas de la península de Yucatán.
Los arqueólogos analizaron el interior de la pirámide, también conocida como El Castillo de Kukulkán, para saber si existían más estructuras.
"Con la técnica no invasiva no daña el patrimonio histórico de la nación, se iluminó el interior", indica el reporte.
Una tomografía eléctrica con 10 detectores alrededor de los diferentes cuerpos de la pirámide permitió enviar corriente eléctrica al subsuelo: "una serie de electrodos, también permitió medir de manera simultánea la diferencia de potencial y, finalmente, la resistividad del subsuelo".
La altura de la más antigua descubierta por los universitarios es de alrededor de 10 metros, más un adoratorio, mientras que la pirámide encontrada en los años 1930, medía 20 metros.
Hasta la fecha se desconocía si en los restos arqueológicos había más etapas constructivas, como ocurrió con otras pirámides de México, que distintos linajes van sobreponiendo una formación piramidal sobre otra, con fines rituales, basados en las mediciones del tiempo y calendarios antiguos.
La estructura descubierta a principios del siglo XX correspondería al periodo de transición, y la nueva encontrada correspondería al estilo "maya puro", el más antiguo.
En 2007, el Templo de Kukulkán, en la península de Yucatán, fue reconocido como una de las siete maravillas del mundo moderno.
Las maravillas de México "Hallan pequeña estructura en pirámide de Chichén Itzá" https://t.co/YlInPrO2vj
— Mangel (@mangelsaga_) 17 ноября 2016 г.