El analista describió el S-500 como un sistema antiaéreo y antibalístico avanzado, unificado, universal, multipropósito e integrado, que debe sustituir el S-300 y complementar el complejo S-400.
"Este es el siguiente paso: son capacidades de defensa aérea a niveles operacionales y estratégicos", subrayó. El S-500 "nos permite proteger regiones enteras de misiles balísticos intercontinentales y otras armas avanzadas, incluyendo las aeronaves hipersónicas que actualmente se desarrollan en EEUU".
El experto agregó que el S-500 también será capaz de alcanzar objetivos en el espacio cercano, incluyendo satélites equipados con sistemas de supervisión electro-ópticos.
"Es una gran decepción para el Pentágono: tanto dinero gastado en crear un sistema para el llamado 'ataque global rápido', para desarrollar aviones hipersónicos y misiles de crucero. Y todo resulta ser 'tirado por el inodoro'. Son cientos de miles de millones de dólares", explicó el experto militar.
Murajovski también señaló que funcionarios del Pentágono, en unos documentos, expresaron su preocupación de que Rusia esté creando, según ellos, "zonas impenetrables de acceso limitado o prohibido" en sus fronteras, en particular, en la región de Kaliningrado y el Lejano Oriente.
Además, el más reciente sistema de defensa aérea de Rusia "ha hecho que los estadounidenses se sientan nerviosos teniendo en cuenta que el S-500 es un sistema puramente defensivo y de que Estados Unidos se retiró unilateralmente del Tratado de Misiles Antibalísticos".
Washington decidió retirarse del tratado en 2001, dejando sin efecto uno de los acuerdos internacionales claves con respecto a las armas.
Las características técnicas del complejo S-500, diseñado por Almaz Antey, le permiten detectar y atacar simultáneamente hasta diez ojivas, separadas de los misiles balísticos, que vuelen a una velocidad de hasta 7 kilómetros por segundo, lo que equivale a 25.000 km/h.
El S-500 será una actualización importante al complejo S-400 de última generación que ya está en servicio.
"Está claro que el S-500 está destinado a servir como un sistema de misiles antibalísticos de alta altitud para la defensa nacional, que podría ser útil para el A2-AD [anti-access/area denial, por sus siglas en inglés] y para funciones antisatélites. Está diseñado para ser móvil y difícil de detectar o hackear y para resistir los ataques de supresión de defensa aérea", escribió anteriormente Sébastien Roblin para The National Interest.
