"Una prueba rápida ha demostrado la presencia de sustancias que apuntan al uso de municiones con agentes tóxicos, me refiero al cloro y el fósforo blanco", dijo un técnico del Centro que había desplegado un laboratorio móvil en Alepo.
Ambas sustancias están prohibidas por la Convención de Armas Químicas del 13 de enero de 1993.
Las muestras tomadas sobre el terreno se someterán a estudios adicionales en Moscú, en un laboratorio acreditado por la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas (OPAQ).
El barrio 1070, que el Ejército gubernamental recuperó hace unos días, sufre bombardeos artilleros por parte de grupos armados.
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Algunos proyectiles llevan sustancias tóxicas, a juzgar por decenas de personas que han ingresado en hospitales locales con asfixia, grave tos, otros problemas respiratorios, trastornos de visión y demás síntomas característicos.
