"La Asamblea Nacional no tiene facultad de destituir al Presidente, ni siquiera para nombrar magistrados", insistió Istúriz en entrevista a Radio Nacional de Venezuela (RNV).
El vicepresidente calificó como un intento de golpe de Estado, que el Parlamento haya citado al presidente Maduro a comparecer sobre responsabilidad en la situación actual del país y la supuesta ruptura del hilo democrático.
No obstante, el vicepresidente destacó la capacidad de resistencia del sector oficialista.
Para Istúriz el proceso político que vive Venezuela, desde la llegada del expresidente Hugo Chávez (1954-2013), "dio paso al despertar de todos los movimientos sociales", no sólo en ese país, sino también en otras naciones de la región como Brasil, Argentina, Nicaragua, Uruguay, Bolivia y Ecuador.
"Eso hizo que cambiara la correlación de fuerzas de América Latina, un reentusiasmo y repolitización del movimiento social en América Latina", aseveró.
En ese sentido, aseguró que lo sucedido en Argentina y Brasil no se trata de una acción aislada, sino que forma parte de un proceso de recolonización promovido por el presidente de los Estados Unidos, Barack Obama "para acabar con los movimientos progresistas y con la revolución bolivariana".
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— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 31 октября 2016 г.
El vicepresidente afirmó que esta actuación se vio reflejada en Venezuela mediante "el golpe parlamentario emprendido por la derecha".
