"Condenamos enérgicamente la muerte de los civiles tras los ataques aéreos de las Fuerzas Aéreas de EEUU en Kunduz y exigimos que se investigue de inmediato e imparcialmente lo sucedido y se castiguen los culpables por la tragedia para evitar la repetición de estos casos indignantes", dice el comunicado de la Cancillería rusa.
El comunicado indica que "no es el primer caso cuando en Afganistán mueren civiles por el uso indiscriminado de armas por los militares estadounidenses".
Antes la revista Foreign Policy informó citando a fuentes que la fiscal de la Corte Penal Internacional, Fatou Bensouda, comenzará próximamente una investigación de los posibles crímenes de guerra y de lesa humanidad en Afganistán, incluidos los que se atribuyen a EEUU, probablemente después de las elecciones presidenciales estadounidenses del 8 de noviembre.
La coalición internacional encabezada por EEUU finalizó su misión de combate en Afganistán en diciembre de 2014 y desde el 1 de enero de 2015 la OTAN puso en marcha una nueva operación no militar con 12.000 soldados, cuyas tareas incluyen la formación y el asesoramiento de las fuerzas de seguridad afganas.
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Afganistán vive una situación de inestabilidad política, social y en materia de seguridad a raíz de ataques perpetrados por el movimiento islamista Talibán y otros grupos radicales como la organización terrorista Daesh (el autodenominado Estado Islámico), proscrita en Rusia y otros países.