Un periodista del periódico The Intercept preguntó al diplomático si el país árabe intenta seguir usando armas de racimo en Yemen, durante la conferencia anual de políticos árabe-estadounidenses que tuvo lugar la semana pasada en Washington.
"Es como preguntarme: ¿Dejarás de golpear a tu esposa?", contestó Al Saud riendo. Al seguir recibiendo preguntas parecidas, el príncipe añadió: "Sois operadores políticos, yo no soy político".
También declaró que Arabia Saudí seguirá bombardeando las posiciones de los rebeldes hutíes en Yemen "cueste lo que cueste".
"Si alguien amenaza la vida de otros, viola las fronteras, en cualquier región, vamos a seguir golpeándolas, pase lo que pase ", recalcó.
Desde 2014 Yemen es escenario de violentos enfrentamientos entre rebeldes hutíes y los partidarios del expresidente Alí Abdalá Saleh, por una parte, y las fuerzas leales al presidente legítimo Abdo Rabu Mansur Hadi, por otra, a las que apoya desde marzo de 2015 una coalición de países del Golfo Pérsico y África del Norte encabezada por Arabia Saudí.
El conflicto costó la vida a más de 4.000 civiles entre marzo de 2015 y octubre de 2016, según la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (OACDH) de Naciones Unidas.