El diseño de las cometas de tracción (kite en inglés) hace posible usarlas en condiciones extremas, sea en las llanuras, en las montañas o en el mar.
"Son cometas de gran superficie, capaces de subir a grandes alturas y cumplir un sinnúmero de tareas: retransmitir señales para buques de guerra y tropas, trasladar cargamentos a través de ríos y montañas, observar y vigilar el terreno, efectuar el reconocimiento militar, etc.", dijo un portavoz de la empresa.
También reveló que para poder levantar el vuelo las cometas de tracción se deben inyectar con helio, pero ya después vuelan por sí solas aprovechando las corrientes de aire.
Las cometas pueden tener una superficie de 30 a 250 metros cuadrados en función de las tareas que cumplen.
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"La idea de las cometas de tracción no es nada nueva, los militares ya estaban interesándose desde hace tiempo por estas alas volantes, pero la idea no avanzaba por falta de materiales adecuados: ahora ya los tenemos y son materiales resistentes a vientos huracanados, balas y cortaduras", dijo el portavoz de la corporación rusa.
Creada en marzo de 2014, la Corporación Unificada de Construcción de Instrumentos de Precisión es un conglomerado de más de 60 empresas y centros de investigación rusos especializados en ingeniería radioelectrónica.