La puerta estuvo abierta entre el martes 18 de Octubre y el sábado 22. La idea fue garantizar una salida segura de civiles por seis corredores y preparar la evacuación de enfermos y heridos de la parte oriental de Alepo, y también para que los rebeldes se retiraran libremente de esa parte de la ciudad. No obstante, el objetivo de este "gesto de buena voluntad" como lo calificó el canciller ruso Serguéi Lavrov, no se logró.
El analista internacional Adnan Ezzedine, afirma que las treguas que solicita Occidente son para que los terroristas se puedan rearmar, reorganizar y recuperar algunos terrenos en Alepo. Así, el experto indica que durante la última semana, el ministro de Defensa de Siria manifestó que dentro de las ayudas humanitarias, llegan para los terroristas armas sofisticadas suministradas por EEUU.
Ezzedine explica que los terroristas de Daesh son una suerte de "empresa" u organización terrorista que actúa no sólo en Siria, sino que también lo hace en Libia y otros países de África. Se trata de "mercenarios a sueldo y están tomando todas las zonas que tienen petróleo o gas. Es una ‘empresa’, no es una oposición. Si fueran una oposición, hubieran llegado a un acuerdo hace tiempo", concluye Adnan Ezzedine.