La política de Obama sobre Siriasigue siendo cada vez más incoherente y dañina para los intereses de Estados Unidos, dice el autor del artículo. Según él, Moscú ha aprovechado las dudas de Washington y como resultado ha establecido unas beneficiosas relaciones con Teherán y Ankara. De esta manera, Rusia consiguió crear una gran brecha en la propia OTAN, alejando aún más a Turquía de Occidente y especialmente de Estados Unidos.
"En Siria radican muchos problemas, con soluciones difíciles, pero la política de Obama sobre Siria es uno de los ejemplos más patéticos y tristes de seria ineptitud en la arena política mundial", dice Walter Russell Mead, autor del artículo.
Washington trata de ocultar "la desnudez de su política con extraordinarias y retóricas acusaciones de crímenes cometidos", lo que subraya aún más el horrible vacío moral y político en el enfoque del presidente sobre las relaciones internacionales, concluye el autor.