Sánchez añade que hay que pensar en el territorio del Chocó, el selvático departamento del extremo noroeste de Colombia que es una de las zonas más pobres y olvidadas del país.
En esos lugares que tienen graves problemas de infraestructura, salud y servicios públicos, "¿cómo se piensa en procesos de paz, sobre todo con sectores guerrilleros que son radicales frente al tema social?", dice Sánchez.
"Que la gente se alumbre con lámparas artesanales, no es vida; o que las comunidades indígenas salgan a horas de madrugada a hacer sus necesidades al pie del río, o que las comunidades negras en Riosucio y en el Atrato sean quienes balsean en pleno siglo XXI", describe el secuestrado.
Al sentarse a dialogar con organizaciones radicalizadas "no es el cuento de desmovilizarse por desmovilizarse, sino que tener mayor posibilidad de solucionar los problemas sociales, es un hecho que me lleva a convocar a todos los sectores de opinión", agrega.
Al volver a dirigirse a los políticos y analistas, "porque sé que son amigos de que los colombianos vivamos en paz", les advierte que "nadie se va a salir de donde se siente seguro a la inseguridad de la capital o de las cabeceras municipales, eso es condición sine qua non de mucha gente que no cree en el Gobierno, que no cree en el Estado".
Para el dirigente político secuestrado resulta muy difícil, salvo que se crea en el Estado y en el Gobierno, "poder tener una paz estable y duradera en estas condiciones".
El exrepresentante asegura en el vídeo que es bien tratado por la guerrilla y que recibe comida saludable "cuando hay".
Ante ese resultado, el acuerdo quedó en suspenso y las conversaciones entre el Gobierno y los promotores del "No" permanecen en la indefinición.
Mientras tanto, el ELN y el Gobierno anunciaron el lunes que comenzaba la fase pública de sus propias negociaciones de paz y que la mesa de diálogo se instalará el 27 de este mes en la capital de Ecuador.