Según los científicos, la radiación cósmica podría desempeñar esta misma función en aquellos entornos que carecen de luz estelar, como, por ejemplo, las áreas que están situadas por debajo de la superficie o los llamados 'planetas errantes', que no giran en torno a ninguna estrella.
Su idea surgió de la observación de un fenómeno terrestre. En nuestro planeta también viven organismos que pueden existir sin Sol, como la bacteria Desulforudis audaxviator, que sobrevive a unos tres kilómetros bajo tierra y se alimenta de subproductos del uranio, del torio o del potasio radioactivos.
Las partículas radioactivas proporcionan la energía necesaria para mantener la vida mediante un proceso llamado 'radiolisis', es decir, la descomposición de las sustancias químicas mediante la radiación nuclear.
Según la idea del científico, las formas de vida que utiliza este curioso método alimenticio podrían permanecer en las profundidades de los satélites, cometas o planetas, por ejemplo, bajo la superficie de Marte o de Plutón.
New research by Dr. Dimitra Atri suggests that cosmic rays could power extraterrestria lifehttps://t.co/dzFRayMBd5
— Blue Marble Space (@BlueMarbleSpace) 6 октября 2016 г.
Al mismo tiempo, los organismos que viven en estas condiciones deberían tener un metabolismo muy lento y es poco probable que este tipo de ecosistemas pueda evolucionar en organismos más complejos. De modo que, si existen formas de vida extraterrestres basadas en la radiación cósmica, apenas serán más avanzadas que la bacteria que actualmente vive en la Tierra.