"El ataque se llevó a cabo con las armas que los estadounidenses habían proporcionado a los agresores saudíes, lo que convierte a EEUU en el cómplice del crimen perpetrado por Arabia Saudí", cita a Shamjani la agencia Irna.
La ONG Amnistía Internacional (AI), en un comunicado reciente, calificó de indignante el suministro de armas estadounidenses a la coalición árabe.
El Departamento de Estado de EEUU, según la AI, aprobó en noviembre de 2015 una transferencia de armas por valor de 1.290 millones de dólares a Arabia Saudí, incluyendo bombas no guiadas Mark MK89, a pesar de que expertos de la ONG habían documentado su uso en ataques aéreos ilegales que mataron a decenas de civiles.
Varias rondas de negociaciones entre las partes en conflicto, la última en agosto pasado, no aportaron resultado.
El conflicto en Yemen costó la vida a más de 4.000 civiles entre marzo de 2015 y octubre de 2016, según la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos (OACDH) de Naciones Unidas.