"De nuevo se comienza a decir —a veces a un alto nivel político— que es necesario introducir una zona de exclusión aérea en el espacio aéreo de Siria para estabilizar la situación, pero esto es inaceptable absoluta y categóricamente", dijo Riabkov.
Según el vicecanciller, la zona de expulsión aérea es "un camino directo hacia la ulterior ampliación del conflicto" en Siria.
"No debemos forzar a nadie a cometer acciones que convienen solo a una parte, sino debemos todos en un formato colectivo (…) encontrar un modo para que no solo un bando del conflicto cumpla los puntos del acuerdo (ruso-estadounidense), sino todos a los que patrocinan EEUU y otros países de Europa y el Golfo Pérsico", subrayó Riabkov.
Estos países, continuó, deben "entrar en razón y dejar sus acciones subversivas y criminales que solo aumentan los sufrimientos del pueblo sirio, minan la posible solución del problema y dañan el acuerdo concordado con dificultad por (el canciller ruso Serguéi) Lavrov y (el secretario de Estado de EEUU John) Kerry".
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El miércoles al intervenir en una reunión del Consejo de Seguridad de la ONU Kerry abogó por cesar los vuelos de toda la aviación en ciertas zonas de Siria, incluidas las áreas donde además del Frente al Nusra (Fatah al Sham) se encuentran unidades de la oposición reconocida.
A juicio de Kerry, es importante hacerlo para contribuir a la desescalada de la situación y garantizar el acceso humanitario.
Desde entonces se detectaron múltiples violaciones del alto el fuego; los casos más resonantes fueron un bombardeo de EEUU contra el Ejército sirio en Deir Ezzor con más de 80 víctimas mortales y un ataque contra un convoy humanitario al suroeste de Alepo que se cobró al menos 20 vidas.
El pasado lunes, el Ejército sirio dio por concluida la tregua debido a las numerosas infracciones por parte de los grupos armados de la oposición.
