Así lo confirmó el lunes la Guardia Civil española, que no ofreció más detalles sobre las víctimas, aunque informó de que no encontraron indicios de que se hubiera forzado la entrada de la casa de la familia para cometer los asesinatos.
Un portavoz de la Guardia Civil aseguró que por el momento las investigaciones apuntan a que el crimen fue cometido por profesionales.
Los cuerpos fueron encontrados descuartizados en bolsas de plástico cerradas con cinta adhesiva, lo que lleva a pensar a las autoridades que los autores del crimen querían deshacerse de los cadáveres pero interrumpieron el proceso.
La localidad de Pioz, de apenas 4.000 habitantes, decretó dos días de luto y este martes celebrará un minuto de silencio por las víctimas.