"Esta tregua es sumamente frágil y ahora la tarea principal es esperar cuando se hayan separado los grupos terroristas y la oposición moderada", dijo Peskov.
Agregó que esta tregua ofrece la esperanza de que "favorezca de verdad al arreglo pacífico y cree una atmósfera necesaria para el arreglo político".
El lunes en Siria entró en vigor un alto el fuego pactado la semana pasada en Ginebra por el secretario de Estado de EEUU, John Kerry, y su homólogo ruso, Serguéi Lavrov, entre otras medidas para acabar con la violencia en Siria y allanar el camino hacia una solución política del conflicto.
En un principio, la tregua se estableció por 48 horas prorrogables con la esperanza de que se vuelva sostenible.
Si el armisticio se respeta durante siete días, EEUU y Rusia pondrán en marcha un mecanismo para separar a los rebeldes moderados de los yihadistas y procederán a coordinar la campaña de ataques aéreos sobre las posiciones de los terroristas, mientras que la aviación militar siria tendrá prohibido sobrevolar estas zonas.
Los acuerdos entre EEUU y Rusia prevén asimismo la creación de una zona desmilitarizada para garantizar la llegada de ayuda humanitaria a Alepo.