La donación de la USAID cubrirá la primera parte de un proyecto a desarrollarse entre 2016 y 2021 para recopilar datos "en las encuestas integradas agrícolas (AGRIS, acrónimo en inglés de agricultural integrated surveys)", dice el texto despachado por la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura).
La metodología AGRIS permitirá obtener mejores datos anuales de producción agrícola, así como una información estructural más amplia y detallada sobre las explotaciones, incluyendo empleo, uso de maquinaria, costos de producción, prácticas agrícolas e impactos ambientales, según la FAO.
En la recolección de estas informaciones se emplearán teledetección, GPS, tecnologías móviles y procedimientos para almacenar y procesar "macrodatos".
La fase piloto se llevará a cabo en dos países de África subsahariana, uno de América Latina y uno de Asia que están en proceso de ser elegidos.
"En las próximas décadas, la humanidad necesitará producir más alimentos para una creciente población, usando recursos naturales como el agua, la tierra y la biodiversidad de forma sostenible, al tiempo que intenta hacer frente a los retos que impone el cambio climático" dijo el director general de la FAO, José Graziano da Silva.
Por su parte, la asistente del Administrador de la oficina de la USAID para Seguridad Alimentaria y coordinadora adjunta de Desarrollo de la iniciativa Alimentar el Futuro, Beth Dunford, se mostró complacida por el acuerdo.
"Los sistemas nacionales de datos sólidos son críticos para que los gobiernos y los actores del sector privado tomen decisiones informadas e inteligentes que fomenten la seguridad alimentaria y la prosperidad económica", dijo Dunford.
La FAO estima que la tecnología AGRIS permitirá integrar fuentes de datos dispares, mejorará la actualidad de los datos y su facilidad de uso y reducirá los costos de recolección de información.