Los medios de comunicación alemanes no solo transmiten una imagen negativa de Rusia a la opinión pública sino que también ejercen mucha presión sobre los políticos y los círculos empresariales del país, informa Freie Welt.
Los medios alemanes son un mecanismo transatlántico de propaganda, y para este mecanismo, los intereses de Washington prevalecen sobre lo que piensen en Berlín, añade el artículo.
De hecho, los lectores a menudo ignoran la existencia de estas relaciones, destaca el Freie Welt.
Finalmente, no se puede olvidar la relación de dependencia entre los medios alemanes y la administración de las fuerzas de ocupación occidentales después de la guerra. En aquellos años, se formó una verdadera 'unión' de Occidente contra la URSS, y es muy difícil "deshacerse de este legado", concluyó el portal.