"La inspección de la disposición de combate del Ejército ruso puede considerarse como un nuevo intento provocativo de ejercer presión sobre Occidente de cara a la reunión del Grupo de los 20 países más ricos del mundo (G20)", dice el comunicado difundido tras una reunión convocada por el titular polaco de Defensa, Antoni Macierewicz, a raíz de la inspección rusa.
"También mantenemos un contacto constante con nuestros aliados (de la OTAN)", añade la declaración.
El ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, anunció el jueves una inspección sorpresa en tres distritos militares, así como en las fuerzas navales, aeroespaciales y aerotransportadas del país.
La inspección se prolongará del 25 al 31 de agosto y, según Shoigú, se enmarca en "los preparativos para defender los intereses de la Federación Rusa en medio de las crecientes amenazas a su seguridad".
La próxima cumbre del G20 se celebrará el 4 y 5 de septiembre de 2016 en la ciudad china de Hangzhou.