"Empezar esta nueva ronda de carrera armamentista es una tontería extrema que se basa en la falta de comprensión", declaró Perry.
Estados Unidos está modernizando su tríada nuclear con especial énfasis en las necesidades de la Fuerza Aérea.
La corporación Northrop Grumman se adjudicó recientemente un contrato para construir la próxima generación de bombarderos estratégicos B-21, mientras que Lockheed Martin y Boeing anunciaron que planean presentar propuestas para el desarrollo de misiles balísticos intercontinentales (ICBM) en el marco del programa GBSD.
"En realidad, nadie sabe el costo (de estos sistemas) pero la gente menciona cifras del orden de un billón de dólares; no sé cuál es la cifra correcta, en todo caso, (un billón) es lo mínimo", dijo Perry.
"Estoy procurando que la gente tome conciencia de lo peligroso, realmente peligroso, que es el asunto, pero la gente no piensa en eso, sino en que solo se trata de si deberíamos construir estos bombarderos o construir estos misiles o no", comentó Perry.
La debilidad de la tríada nuclear de EEUU, según él, consiste en que el adversario sabe dónde están emplazados los ICBM.
"Si hay una guerra nuclear, serían los primeros objetivos y el problema es que aquí somos conscientes de todo eso y, por tanto, si vemos en nuestro sistema de alerta una señal de lanzamiento inminente, tenemos que decidir de inmediato si lanzamos nuestros ICBM", afirmó Perry: "Los ICBM son los únicos que plantean este problema particular", apuntó.
William Perry fue secretario de Defensa de EEUU de 1994 a 1997.