Pero el director del European Policy Center y especialista en temas migratorios, Yves Pascouau, no piensa del mismo modo: “siempre consideré que Turquía no era un tercer país seguro, y si no lo era ayer, no lo será más hoy”. Y añadió que la principal amenaza para el acuerdo sigue siendo la supresión de visados para los turcos que quieran entrar en Europa.
El Dr. Armando Fernández Steinko, señala que la diplomacia de Derechos Humanos de la Unión Europea es muy contradictoria, y cada vez lo es más. Por un lado, la opinión pública del viejo continente no ve con buenos ojos el reconocimiento de Turquía como un socio del bloque por infringir una serie de medidas y procedimientos considerados inaceptables.
Pero por otro lado, indica el analista, la europea es una diplomacia basada en hechos que obligan a contradecir sus propios principios humanitarios. Esto ha sido siempre contradictorio: la realidad y la diplomacia han sido siempre diferentes, siempre han divergido, y es algo que se hace cada vez más dramático, opina Fernández Steinko.
Asimismo, el también profesor de la Universidad Complutense de Madrid explica que el adn diplomático de la UE es de respeto a los DDHH, no obstante, aclara que “la UE tiene muchísimos antecedentes de no respeto, o de reconocimientos de Gobiernos que por razones geoestratégicas lleva a infringir muchos de los principios fundacionales de la UE a la hora de estructurar su política exterior”.