"Pokémon Go es el juego más 'caliente' del verano, también porque utiliza características como ubicación, sensores de movimiento y de realidad aumentada. Sin embargo, estas particularidades consumen rápidamente la batería del teléfono", explicó Ben Arnold, director ejecutivo y analista del Grupo NPD.
La empresa afirma que las ventas de las baterías portátiles crecían solo un 4% año tras año, según el estudio realizado seis semanas antes del lanzamiento de Pokémon Go. Sin embargo, el juego hizo disparar las ventas hasta un 101% entre el 10 y 23 de julio, cuando los compradores gastaron 1,2 millones de dólares en este accesorio para no interrumpir y alargar el tiempo del juego.
Después de todo, resulta que los monstruos virtuales sí que tienen un impacto directo en el mundo real, tanto en el ámbito de provocar situaciones peculiares como generar ingresos directos para los negocios de todo el mundo.