El grupo estaba en el autobús que les trasladaba a la Villa Olímpica cuando se vio sorprendido por un fuego cruzado cerca del Complexo da Maré, uno de los conjuntos de favelas más peligrosos de la ciudad.
Aunque nadie resultó herido, los deportistas chinos colgaron en las redes sociales fotos de los vendedores ambulantes que normalmente trabajan entre los coches vendiendo su mercancía acostados en el suelo para evitar las balas.
Más tarde la Policía Militar informó de que cuatro hombres efectuaron disparos contra una guarnición que custodiaba las líneas Amarela y Vermelha, dos de los principales accesos a la ciudad.
Uno de los disparos dañó la puerta del coche policial, pero no hubo heridos; los autores huyeron después de los disparos, según la policía.
Los tiroteos son una rutina habitual en el Complexo da Maré y en el vecino Complexo do Alemão, ambos muy próximos a la carretera que comunica el aeropuerto de Río con el centro y la zona sur de la ciudad.
