Entre los detenidos se encuentra una mujer que se declaró en huelga de hambre.
Los agentes procedieron también a retirar las pancartas que reclaman la dimisión del presidente del país Serzh Sargsián.
El ataque al cuartel policial en Erebuni, en la periferia de Ereván, se produjo el 17 de julio.
El grupo armado exige la dimisión del presidente y la liberación del opositor radical Yirair Sefilián, líder de las formaciones Nueva Armenia y Parlamento Constituyente, que se encuentra detenido por posesión ilegal de armas.
Según la policía, en el asalto un agente murió y seis personas, entre ellas cinco agentes, resultaron heridas.
Tras negociaciones con los atacantes, el 23 de julio todos los rehenes fueron liberados.