"Manifestamos, no obstante, nuestra preocupación con los relatos de cercenamiento de libertades individuales de miles de miembros del poder judicial, incluyendo jueces y procuradores, tras ese episodio", asegura el ministro en un comunicado divulgado este lunes.
A lo largo del fin de semana el gobierno de Recep Tayyip Erdogan mandó detener a un centenar de jueces y apartó de sus cargos a 30 gobernadores provinciales y a casi 20.000 servidores públicos como represalia por su presunta participación en la intentona golpista.
En el comunicado el gobierno brasileño también expresa su voluntad de que la "paz y la tranquilidad institucional" sean plenamente restablecidas en este país "amigo" y destaca que el golpe fue derrotado gracias a la participación de la sociedad civil y al apoyo unánime de todos los partidos.