"Durante muchas décadas Rusia y Turquía han sido importantes vecinos económicos, pero entre vecinos también puede existir algún tipo de diferencias, es importante que estas se resuelvan en interés de los dos países y con respeto mutuo, nosotros logramos hacerlo", dijo Kurtulmus durante una conferencia internacional sobre turismo y medios de comunicación.
"Pero no se debe esperar que esto suceda de la noche a la mañana", añadió.
El vice ministro recalcó que en primer lugar las partes fortalecerán los lazos económicos, incluyendo el ámbito del turismo, que según él, es uno de los elementos más importantes de los ingresos para el presupuesto de Turquía y representa una expansión significativa a los contactos culturales y sociales entre los dos países.
Las relaciones entre Moscú y Ankara se deterioraron después de que un caza turco abatiera el 24 de noviembre de 2015 un avión militar ruso Su-24 que retornaba a su base tras bombardear instalaciones terroristas en Siria, lo que el presidente Vladímir Putin calificó como una "puñalada por la espalda" ordenando al Gobierno imponer restricciones económicas a Turquía.
En una conversación telefónica, Putin y Erdogan acordaron proceder al restablecimiento de la cooperación.
El líder ruso levantó la prohibición a la venta de paquetes turísticos y vuelos chárter a Turquía y pidió al Gobierno intensificar los contactos para cancelar gradualmente las demás restricciones.