Los disparos se efectuaron contra 300 objetivos terrestres y 40 aéreos, tanto estáticos como en movimiento.
Además, en un campo de entrenamiento especialmente diseñado para los carros de combate, los blindados superaron zanjas y campos de minas, así como puentes y pendientes.
En total, durante los ejercicios, los tanques recorrieron más de 1.000 kilómetros y mejoraron las capacidades de todos los miembros de la tripulación.