"Ciertamente no quiero un superestado europeo. Quiero lo contrario: una Europa pequeña", dijo a la televisión VTM.
"Si estamos de brazos cruzados, esto podría ser el principio del fin", advirtió.
El jueves pasado el Reino Unido celebró un referendo sobre la permanencia del país en la UE. El 51,9 por ciento o 17,4 millones de los británicos, votó a favor del Brexit, mientras que unos 16,1 millones votaron en contra.
El primer ministro británico, David Cameron, quién había convocado el plebiscito y abogado por la permanencia del país en la UE, anunció después de los resultados del referéndum que dimitiría en los próximos meses.
Asimismo declaró que todos los procedimientos relativos a la retirada del país del bloque se realizarán a cargo de un nuevo primer ministro lo que provocó descontento de muchos políticos europeos que exigieron del Reino Unido una inmediata notificación a Bruselas y pronto inicio de las negociaciones para definir el marco de sus futuras relaciones con la Unión.