La sesión continental a la cual se opuso Caracas, acusando a Almagro de promover un golpe de Estado, se ha celebrado "a pesar de algunos cuestionamientos sobre la realización del encuentro y los temas que abordaría los miembros decidieron llevarlo a cabo", dijo la secretaría de Relaciones Exteriores del gobierno de Enrique Peña en un comunicado.
En la sesión para recibir el proyecto de titular de la OEA —aprobada con 20 votos a favor, México incluido, 12 en contra y 2 abstenciones—, "Almagro reiteró su posición en el sentido de que en Venezuela ha ocurrido una alteración del orden constitucional", dijo la cancillería en un pronunciamiento escrito.
Ante esta conclusión del líder de la OEA, "de conformidad con el artículo 20 de la Carta Democrática Interamericana, los miembros deben adoptar medidas que faciliten el regreso a la normalidad democrática en ese país", prosigue el texto del despacho que encabeza la canciller mexicana Claudia Ruiz.
Las medidas que se adopten en busca de soluciones en Venezuela deben hacerse "con apego a la democracia, los procedimientos constitucionales y el respeto de los derechos humanos", dice el gobierno mexicano.
Tlatelolco fija postura
Al fijar su postura sobre Venezuela en la sede de la ONU en Washington, Tlatelolco, como se conoce a la sede histórica de la diplomacia mexicana, reitera "la importancia del diálogo abierto e incluyente entre todos los actores políticos y sociales de esa nación".
El Gobierno de México ha expresado, además, su voluntad de contribuir a cualquier esfuerzo para resolver la crisis en el país caribeño "que abone al bienestar del pueblo venezolano y facilite de manera oportuna, pronta y efectiva la solución de las diferencias".
Finalmente, manifestó su respaldo a todas las iniciativas de diálogo nacional, incluida la de los ex presidentes José Luis Rodríguez Zapatero de España, Leonel Fernández de la República Dominicana y Martín Torrijos de Panamá.
Venezuela se opuso a la sesión porque considera que "el secretario de esta organización (el uruguayo Almagro) está promoviendo un golpe de Estado, facilitó los salones protocolares para que se solicite la aplicación de la Carta Democrática a Venezuela", con la pretensión de "desconocer el Gobierno constitucional" de su país
Desencuentros
La canciller Rodríguez presentó ante la sesión de la OEA "un sentido homenaje, porque sabemos la represión que han sufrido y la bárbara masacre que allí se ha cometido", en contra de maestros y seguidores que se oponen a una reforma educativa en México.
Ruiz respondió que "la visión que tenemos en la OEA es que todos los pases de la región debemos seguir contribuyendo a consolidar a nuestra región conforme a los principios democráticos".
Y reviró "un llamado para que las partes en Venezuela encuentren en sus mecanismos constitucionales un espacio de diálogo, para enfrentar los retos que tiene ese país, en este momento".
Este es el segundo episodio ríspido entre los dos gobiernos latinoamericanos este año, luego de que la canciller de México recibió en su despacho, en febrero pasado, a la esposa y la madre del Leopoldo López, líder político encarcelado de la oposición de Venezuela.
Aquella vez, Rodríguez reaccionó señalando que México "apoya acciones terroristas en Venezuela y olvida las terribles violaciones a los Derechos Humanos ocurridos en su país".