Temer recibió a los representantes de San Marino, Australia, Mauritania, Argentina, Colombia, Kazajistán, Sudáfrica, Perú, Macedonia, Trinidad y Tobago y Bolivia, con los que ha departido durante unos minutos, según informa la prensa local.
Este tipo de ceremonias son puramente protocolarias y suelen celebrarse dos o tres veces al año, según el Ministerio de Relaciones Exteriores; sin embargo, en poco más de un mes ya es la segunda vez que Temer recibe a embajadores.
El manejo de las relaciones diplomáticas es un asunto delicado desde que Temer asumió el mando del país a través de un proceso de juicio político a la presidenta Dilma Rousseff que fue cuestionado por varios países vecinos.
Venezuela, Bolivia, Cuba o Chile, además de entidades como la Organización de Estados Americanos (OEA) y la Unión de Naciones Sudamericanas (Unasur) se pronunciaron públicamente contra el "impeachment".
Nada más llegar al cargo el nuevo ministro de Relaciones Exteriores, José Serra, divulgó un comunicado en el que subrayaba que esos países difunden "falsedades", medida criticada tanto por la propia Rousseff como por el ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva.