La multinacional japonesa advirtió en una carta a sus empleados británicos que el Brexit podría traducirse en impuestos de hasta el 10 por ciento sobre los coches fabricados por la empresa en Reino Unido.
Nueve de cada diez automóviles que Toyota produce en territorio británico son exportados, mayoritariamente a los países de la UE.
"Si Reino Unido abandona la UE, creemos que difícilmente podrá mantener los actuales acuerdos comerciales (…) y ello significa que tendríamos que pagar aranceles sobre autopartes y coches", dice la carta que se hizo pública el lunes.
También el presidente de Vauxhall, Rory Harvey, dijo que el Brexit sería "indeseable" para esta compañía y el sector automotor en su conjunto.
"Somos parte de una empresa europea totalmente integrada en la que nos beneficiamos del libre movimientos de mercancías y personas", señaló Harvey, cuya compañía forma parte de GM.
Ken Gregor, de Jaguar Land Rover, afirmó por su parte que la permanencia en la UE supone para la empresa "las oportunidades de crecer, crear empleos y atraer inversiones en tecnologías del futuro".
"Nuestra cadena logística europea ha sido fundamental para ayudarnos a cumplir a escala global las expectativas de los clientes y lograr un crecimiento sostenible y rentable", destacó el ejecutivo de esta empresa que es subsidiaria de la india Tata Motors.
El referéndum sobre la permanencia de Reino Unido en la UE se celebrará el próximo 23 de junio.
Una reciente encuesto de Ipsos Mori indica que el Brexit cuenta con el apoyo del 53 por ciento de los británicos.