"La OTAN y Rusia no deben solucionar sus cuestiones aquí; somos un país neutral y pacífico y no queremos convertirnos en un polígono de maniobras", dijo Salaru al intervenir ante el Parlamento.
Además, Salaru llamó a Rusia a reconocer la neutralidad de Moldavia.
"No soy enemigo de Rusia, digan lo que digan; cooperamos activamente con Rusia y tengo reuniones regulares con el agregado militar de Rusia y solo exhorto que Rusia reconozca la neutralidad de Moldavia", indicó.
Chisináu respondió con el envío de tropas al territorio rebelde, lo que dio origen a un conflicto armado que se prolongó por varios meses.
Actualmente, el mantenimiento de la paz en la zona del conflicto corre a cargo de un contingente mixto de Rusia, Moldavia y Transnistria.
Esta última insiste en obtener independencia, pero Moldavia se la niega, ofreciendo a cambio una amplia autonomía.