Al señalar que la VPK cumple en julio 10 años y que la misma edad tiene el Tigr, el jefe de la compañía dijo que tras la modernización este vehículo blindado "se convertirá en una máquina de nueva generación, mejorarán sustancialmente muchas de sus características, incluida la resistencia a las balas y las minas".
El Tigr fue desarrollado para efectuar tareas de reconocimiento y el patrullaje, para acompañar y proteger columnas en marcha, en particular abriendo fuego.
Tiene la protección balística de quinta clase en la proyección frontal y de tercera clase en las proyecciones lateral y trasera; un sistema especial de comunicación y en el techo una torreta giratoria donde pueden instalarse las ametralladoras Kord y Pecheneg o el lanzagranadas automático AGS-17 Plamia.