"Si bien todos, hombres y mujeres, tenemos derecho a viajar de forma segura en transporte público, ya que son absolutamente repudiables las agresiones perpetradas, la gravedad de la situación requiere tomar medidas drásticas que otorguen mayor comodidad y seguridad a las pasajeras mujeres, priorizando su bienestar", declaró la dirigente política Graciela Ocaña, que impulsó el proyecto.
Se propone que las mujeres puedan usar los vagones exclusivos en las horas punta, de lunes a viernes de 7 a 10 y de 17 a 19. El texto del proyecto precisa que las mujeres con niños de hasta 13 años podrán acceder a estos compartimentos acompañadas de los menores.
Encuesta| ¿Cuál es realmente la solución para el acoso sexual en el transporte público? https://t.co/HJgcbi1aBh
— Sputnik Mundo (@SputnikMundo) 9 de junio de 2016
"Como ciudadanos, permanentemente somos testigos de episodios de acoso o abuso de los cuales resultan ser víctimas las mujeres mientras viajan en el transporte público en la ciudad de Buenos Aires. De la misma forma, como mujeres, sabemos que esta es una problemática que nos afecta a todas por igual, y que en cualquier momento podemos sufrir estas situaciones", señaló la autora del proyecto.
La Asamblea Nacional rechazó la iniciativa, puesto que crear vagones solo para mujeres "no tiene ninguna lógica", según el ministro de Transporte, Guillermo Dietrich, que se refirió al tema en Radio Mitre.
"No funcionaría y no lo veo como una solución al problema: todo lo contrario, lo veo como rendirse ante este tipo de situaciones", sentenció el ministro.
Graciela Ocaña reconoció que la solución de este problema necesita de un "abordaje integral", pero destacó que su iniciativa ya se ha implementado con buenos resultados en otros países, por ejemplo, México, Brasil y Japón. Según explicó, en México, tras la incorporación de los vagones exclusivos para mujeres, "las denuncias por abuso sexual se redujeron en un 26%".
En las redes sociales se abrió un encendido debate sobre esto. Algunas mujeres se pronuncian en contra del proyecto del llamado 'subte rosa', porque discrimina a los pasajeros masculinos al considerarlos a todos potencialmente peligrosos. Los usuarios afirman que habría que trabajar en la educación y concientización al respecto. Otros internautas apoyaron la idea, arguyendo que de esa manera las mujeres podrían sentirse más seguras en el suburbano.
Así como estoy en contra del vagón rosa también te cuento que la única forma en la que me dejaron de toquetear en el subte fue envejeciendo.
— Ivana (@ivanaelisabeth) 8 июня 2016 г.
