"Es necesario apostar por nuestros avances tecnológicos y en algunos casos, cuando se trate de un inversor serio, dispuesto a trabajar con Rusia pese a las sanciones, ubicar las producciones en territorio ruso", expresó el alto funcionario tras una reunión de la Comisión Estatal de Desarrollo del Ártico.
Rogozin observó que "en la actualidad el 90 por ciento del equipamiento para investigaciones es extranjero; por ello, cuando hablamos de tecnologías para el Ártico nos referimos ante todo al programa de sustitución de importaciones".
El vice primer ministro destacó que el establecimiento de la producción en Rusia debe ser la condición para la compra de la primera partida y a partir de un determinado porcentaje de compras todo debe producirse, incluyendo los componentes y luego todo el equipamiento, en territorio ruso.
"Ese es el tipo de inversores que necesitamos, solo ese tipo, y no los que vinieron y consideran que pueden vender aquí cualquier cosa", añadió.