"Debemos entender que todo empezó por la agresión rusa contra Ucrania; no se puede trabajar igual que siempre mientras Rusia continúe desestabilizando el este de Ucrania", dijo en una entrevista a Sputnik.
"Luego, por supuesto, podemos debatir la reanudación de algunas de estas actividades (de cooperación)", añadió.
Según Rasmussen, la colaboración entre la OTAN y Rusia permitiría afrontar de manera eficaz los retos mundiales como la situación en Afganistán, Siria e Irak, y la lucha contra el terrorismo, en particular contra el grupo yihadista Estado Islámico (Daesh en su acrónimo árabe, proscrito en Rusia y otros países).
Tanto las autoridades ucranianas como EEUU y la UE acusaron repetidamente a Moscú de intervenir en los asuntos de Ucrania.
Rusia califica de inaceptables estas acusaciones, asegurando que no es parte del conflicto y que está interesada en que Ucrania supere la crisis política y económica.
Tema: Situación en Donbás (primavera de 2016)
El presidente de Ucrania, Petró Poroshenko, nombró a Rasmussen, secretario general de la OTAN entre 2009 y 2014, como su asesor el pasado 27 de mayo.