"Una forma en la que desde nuestras capacidades nacionales podemos reforzar la labor del Consejo de Seguridad de la ONU es utilizando nuestras embajadas en países y regiones con riesgo de conflicto a modo de una red de antenas de alerta temprana", confirmó Margallo en la inauguración de la Conferencia Internacional de Diplomacia Preventiva, en la Casa Mediterráneo de Alicante (España).
Estas "antenas de alerta" avisarán "en tiempo real de situaciones que puedan degenerar en amenazas a la paz y seguridad internacionales", concretó.
Margallo también volvió a insistir en su comparecencia que "es necesario fortalecer la cooperación judicial en este ámbito", para evitar que los terroristas y quienes colaboran con ellos "puedan tener una percepción de impunidad".
Ante esta situación, el canciller reiteró su propuesta de nombrar un representante de alto nivel del secretario general de Naciones Unidas para la prevención del extremismo violento.
Margallo también destacó en su discurso la necesidad de crear un tribunal internacional contra el terrorismo porque "la lucha contra la impunidad y la rendición de cuentas son elementos esenciales de la prevención de conflictos".
El ministro resaltó que el secretario general de la ONU impulsó una iniciativa para vincular este trabajo con la defensa de los derechos humanos, subrayando que en el norte de África y en Oriente Medio "existe una intensa demanda" y ello "requiere del apoyo de la comunidad internacional para fortalecer el Estado de Derecho, el sistema judicial y el acceso a la justicia".
Finalmente el ministro también defendió la necesidad de prestar atención a los derechos culturales como "elemento esencial de una sociedad democrática e inclusiva".
En esta línea, señaló que España e Italia promovieron un fondo para la protección del patrimonio cultural en zonas de conflicto y que España está en el marco para la creación de una red global "de puntos focales sobre mujeres, paz y seguridad para intercambiar buenas prácticas", incorporando "la perspectiva de género".
La promoción de la "libertad de prensa y el trabajo de las ONG" son "igualmente esenciales para sostener una sociedad tolerante, inclusiva y pacífica", añadió el canciller.
Con esta conferencia, España quiere "contribuir desde un enfoque integral al proceso de reflexión en el seno de Naciones Unidas sobre la importancia creciente de la diplomacia preventiva".
En el evento participan representantes de países del Mediterráneo, de Naciones Unidas, de la UE y otras organizaciones regionales, así como reconocidos expertos en la materia, que debatirán y realizarán sus aportaciones en una serie de paneles específicos sobre diplomacia preventiva en el Mediterráneo.
"La mediación y la diplomacia preventiva constituyen una prioridad de la política exterior española, tal y como lo demuestra el activo papel que viene realizando España en los diversos foros internacionales, iniciativas y mecanismos de diálogo político sobre la materia", explica el Ministerio español.