Los investigadores aseguran que gracias al trabajo policial y al desorden dentro de la célula terrorista los ataques causaron menos muertos.
Además, los vídeos de vigilancia muestran que después de que el primer terrorista se inmolara cerca de un mostrador en el aeropuerto de Bruselas, otro se fugó y su maleta con la bomba cayó del carro.
El artefacto "explotó con la fuerza dirigida hacia arriba lejos de los viajeros" destruyendo el techo de la salida del aeropuerto.
23 de marzo 2016, 09:29 GMT
Asimismo los vídeos muestran que los atacantes dejaron escapar a mucha gente.
El tercer terrorista abandonó su bomba sin detonar fundiéndose con las victimas que huían del edificio.
La capital belga sufrió a finales del marzo tres atentados —dos en el aeropuerto Zaventem y una en la estación de metro Maelbeek— que se saldaron con 32 muertos y 340 heridos.
Los atentados fueron reivindicados por la organización terrorista Daesh, proscrita en Rusia y otros países.
