Anteriormente, se informó de siete muertos y más de 320 heridos.
En la embajada de EEUU, junto a la que se encuentra la sede de la misión de la OTAN, se activaron las sirenas.
El portavoz del Ministerio del Interior afgano, Seddiq Seddiqi, atribuyó a un terrorista suicida el ataque que ya reivindicó el movimiento Talibán.
Según varios medios locales, un grupo de insurgentes se enfrentaron a tiros a las fuerzas de seguridad, uno de los agresores habría sido liquidado.
La situación en Afganistán empeoró en los últimos meses, el Talibán que tomó bajo su control una parte considerable de los zonas rurales del país, ahora lanza ofensivas contra las grandes ciudades.
También aumentó notablemente la influencia del grupo terrorista Daesh (autodenominado Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países).
