Konashénkov desmintió además las informaciones publicadas en algunos medios de comunicación sobre supuesto acercamiento peligroso del caza ruso a la aeronave estadounidense mientras esta sobrevolaba el Báltico.
"La información de los medios de comunicación extranjeros sobre supuesta aproximación peligrosa el pasado 14 de abril del caza ruso Su-27 al avión espía estadounidense RC-135 sobre el mar Báltico no se corresponde con la realidad", afirmó.
Explicó que el 14 de abril las fuerzas de defensa antiaérea rusa detectaron un objetivo que se acercaba a la frontera rusa a gran velocidad y enviaron un caza para su identificación.
El aparato en cuestión resultó ser un avión espía de Estados Unidos que cambió su rumbo tras "contacto visual" con el caza ruso, reiteró Konashénkov.
Subrayó que la presencia del avión ruso en el espacio aéreo sobre el Báltico no violó las reglas internacionales.
