"Otra amenaza a líderes de (las organizaciones políticas) Poder Ciudadano y Marcha Patriótica, al Gobierno reitero pedido de protección", escribió Córdoba en su cuenta de Twitter luego de denunciar ante la prensa nacional que fue amenazada a través de un panfleto tras una cena con el presidente Juan Manuel Santos en la ciudad de Cartagena (norte).
Otra nueva amenaza a líderes de @PoderCiudadanos y @MarchaPatriota, al Gobierno reitero pedido de protección. pic.twitter.com/8XCscjxnO5
— Piedad Córdoba Ruiz (@piedadcordoba) 15 de abril de 2016
Córdoba manifestó que "si no hay un combate total al paramilitarismo, es muy difícil avanzar" en el proceso de paz con las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), lo que "pone en mucho riesgo el acuerdo especial de La Habana y deja sin peso y legitimidad el trabajo que se haga, porque los líderes en las regiones están siendo asesinados y tienen temor".
El panfleto de las Águilas Negras dado a conocer por Córdoba señala que "Bogotá ha sido invadida por los voceros de las FARC con el beneplácito del Gobierno, guerrilleros y milicianos haciéndose pasar por defensores de las comunidades".
Por este motivo, sentencian, no están dispuestas "a entregar la ciudad a los terroristas para que instauren el castrochavismo" en la capital del país.
La esquela agrega que "esto no es una amenaza, es una sentencia de muerte" contra Córdoba y los militantes que la apoyan.
También se despachan contra "un sinnúmero de guerrilleros que posan como defensores de derechos humanos cuando en realidad son asesinos y defensores de las FARC".
"No a la falsa paz de Santos. Muerte a toda la escoria guerrillera de la capital. Colombia será un mejor país el día que todos estos comunistas, castristas y chavistas estén muertos", concluye el panfleto.
El debate sobre la existencia del paramilitarismo en Colombia se ha abierto en las últimas semanas ante la insistencia de las FARC de que el mismo debe ser erradicado del país como garantía para que los guerrilleros puedan desmovilizarse y participar en política.
El Gobierno, sin embargo, ha negado la existencia de dichas estructuras y señala que su lugar ha sido tomado por el crimen organizado a través de bandas criminales.
Las declaraciones de Villegas causaron malestar en la delegación negociadora de paz de esa guerrilla, que dijo que lo suyo no se trata de "tácticas dilatorias".
Para sostener sus argumentos, las FARC denunciaron que 346 colombianos, integrantes de organizaciones sociales y populares, han sido asesinados durante la administración de Juan Manuel Santos, contándose entre ellos 112 personas pertenecientes a Marcha Patriótica.
Con el acompañamiento de Naciones Unidas, la Fiscalía, la Policía Nacional y el Ministerio de Defensa se busca tomar "las decisiones que sean necesarias", añadió Cristo según publica el diario El Espectador.
Desde noviembre de 2012, el Gobierno de Colombia y las FARC negocian en La Habana, Cuba, con el objetivo de poner fin a un conflicto armado de más de medio siglo de existencia, que según cifras oficiales ha dejado unos 7,8 millones de víctimas y más de 220.000 muertos.