Entre los coches que no aparecerán en las carreteras rusas se encuentran los nuevos Volkswagen Phaeton, los Cadillac ATS y los Volvo S80, así como los Volvo XC70 y los Peugeot 4008.
Otros vehículos que faltarán en el mercado ruso serán los Citroen C3 Picasso, los Renault Fluence, los Mitsubishi Lancer y los Citroen C5.
Las razones de la huida son diversas, asegura el diario, agregando que, al mismo tiempo, en el país se empiezan a vender otros autos de lujo, por ejemplo, el todoterreno Bentley Bentayga.
El compacto Renault Kaptur, según el periódico, incluso fue desarrollado especialmente para Rusia, país donde los vehículos caros siguen aumentando sus ventas.
Según datos de la agencia Avtostat, en febrero de 2016 la cifra de coches de lujo vendidos fue 2,7 veces mayor que en igual período del año pasado.