La experta aseguró que, paralelamente, se está estudiando la autenticidad de los papeles que apuntan contra el expresidente.
A principios de febrero los investigadores del Instituto de la Memoria Nacional hicieron públicos ciertos documentos hallados en la casa del fallecido general Czeslaw Kiszczak, entre los que aparece una carta del 1970 firmada como 'Bolek', el supuesto nombre clave de Walesa.
En una entrevista a The Guardian Walesa negó esas acusaciones y aseguró que los agentes de seguridad de entonces se enriquecieron a costa de un informante inexistente, firmando por él documentos y recibiendo transferencias.
Al mismo tiempo el político reconoció haber contactado con los servicios de seguridad con el único objetivo de "reunir a personas valientes, moderar a los más arriesgados y formar un equipo que con el tiempo pudiera acabar con el Partido Comunista”.