MOSCÚ (Sputnik) — La policía recibió más de 700 denuncias de abusos sexuales y robos perpetrados en la Nochevieja y atribuidos a inmigrantes.
La nueva normativa establece penas de cárcel de hasta diez años para el agresor, incluso si este no fuerza a su víctima.
El ministro de Justicia, Heiko Mass, defendió la ley y la calificó de un paso importante "para fortalecer la autodeterminación sexual".
Los detractores de la norma consideran que no es lo suficiente rígida y demandan un castigo más severo.
Además cuestionaron la ausencia de artículos que tipifiquen como delito el acoso y la violencia ante una firme negativa de la víctima.
La nueva ley adoptada por el Gobierno requiere previamente el aval del Parlamento para entrar en vigor.
El Legislativo debe examinar la normativa en las próximas semanas.