"Bajo la sospecha de asesinato de una niña han detenido a su niñera", declaró Ivanova.
Reports that #Moscow child was a 3-4yo girl, suspect probably related to fire in an apartment with a headless body, via @JettGoldsmith
— Abraxas Spa (@AbraxasSpa) 29 февраля 2016 г.
La mujer sostenía la cabeza de la niña, gritando "Alá es grande", y amenazaba con inmolarse, informan medios rusos.
"Ella llegó a la entrada de la estación de metro con una bolsa de color rojo, de donde sacó la cabeza de la niña. Estuvo caminando por la calle y gritando algo durante mucho tiempo, pero nadie se le acercaba, porque todos tenían miedo", declaró uno de los testigos del suceso.
Según otro testigo, la mujer caminó por la calle, con la cabeza cortada en sus manos, durante unos 20 minutos antes de ser detenida.
"La mujer caminó, sosteniendo la cabeza de la niña, a lo largo del muro del centro comercial, gritando ‘Alá es grande’", dijo el testigo.
A pocos minutos de su llegada a la estación, apareció un policía que intentó acercarse a la mujer pero ella le amenazó con inmolarse, declaró otro testigo.
Los cuerpos de seguridad acudieron al lugar del suceso, detuvieron a la mujer y examinaron la zona y la bolsa en la que la sospechosa llevaba la cabeza. No encontraron ningún explosivo.
El cuerpo decapitado, de una niña de entre 3 y 4 años, fue encontrado en un apartamento moscovita de un barrio del noroeste de Moscú. Se presume que la niñera esperó a que los padres se fueran para decapitar a la menor, incendiar la casa y salir amenazando a la calle.
La detenida es una ciudadana de Uzbekistán de 38 años de edad, Gyulchehra Bobokulova, informó "Moskovsky Komsomolets", citando a una fuente de los cuerpos de seguridad.
La sospechosa trabajaba ilegalmente en Moscú, dijo a RIA Novosti Olga Kirillova, jefa del departamento moscovita de servicio federal de migración de Rusia.
"La ciudadana de Uzbekistán trabajaba como niñera de manera ilegal. La contrataron sin permiso de trabajo", declaró Kirillova.
Han exigido un peritaje psiquiátrico a la mujer detenida y se ha dado inicio a una causa criminal contra ella.
Durante el interrogatorio, la mujer explicó que sus acciones han sido provocadas por la traición de su marido, informa LifeNews. Sin embargo, la mujer no pudo explicar exactamente de qué manera la infidelidad de su cónyuge está conectada con la familia con la que trabajaba como niñera.
La madre de la niña decapitada fue trasladada inconsciente en ambulancia al hospital, informa el canal de televisión "Zvezda".
El defensor de menores, Pavel Astakhov, calificó el asesinato de la niña de monstruoso e inexplicable, y llamó a los padres a solicitar un certificado psiquiátrico a las aspirantes al puesto de niñera para sus hijos.
"Al contratar a una niñera para su hijo, asegúrense al menos de su estado mental, exijan que se someta a un examen médico para obtener un certificado de psiquiatría", declaró en un mensaje publicado en su cuenta de Twitter este lunes.
El presidente del Congreso de representación de uzbekos en Rusia, Ibrahim Khudaiberdiyev, informó a RIA Novosti de que la institución está dispuesta a ayudar a los organismos encargados de investigar el caso.
"Nos hemos quedado estupefactos al enterarnos de que una niña pequeña fue decapitada y la mujer fue detenida en el metro. Este acto no corresponde a ninguno de nuestros cánones, ni a las madres uzbekas. Creo que las autoridades van a resolverlo. Si las entidades investigadoras necesitan ayuda, estamos dispuestos a colaborar", dijo Khudaiberdiyev.
Anton Tsvetkov, presidente de la Comisión de la cámara pública de seguridad, dijo que los empleadores en Rusia que utilizan los servicios de trabajadores migrantes, deben ser más cuidadosos a la hora de contratar personal y seguir de cerca las peculiaridades de su comportamiento.
Una de las razones para tener una vigilancia extra es la posibilidad de participación de los migrantes en esquemas criminales, incluida la actividad terrorista, dijo Tsvetkov.
Sin embargo, él observó que un solo incidente no debe convertirse en un pretexto para despertar sentimientos xenófobos sin fundamento.
"No hay necesidad de caer en pánico ni despedir innecesariamente a la gente solo basándose en categorías étnicas o religiosas", dijo Tsvetkov.
